Se construyó para albergar en su interior una escuela de pilotos y centro de experimentación de aeroplanos.
La historia del aeropuerto de Málaga se remonta al 9 de marzo de 1919, año en el que a causa de una lluvia el avión pilotado por Pierre George no pudo tomar tierra en la zona situada junto a la playa de la Misericordia el avión Salmson 2A que pilotava, tras sobrevolar la ciudad buscando un lugar donde aterrizar toma tierra en una finca denominada El Rompedizo.
En el avión viajaba Pierre Latécoère, que en ese momento estaba buscando emplazamientos en España para instalar diferentes aeródromos. El objetivo de Latécoère era establecer una línea aérea comercial que uniera Francia con sus colonias africanas a través de España y que, posteriormente, diera el salto hasta Latinoamérica.
Después de algunos vuelos de prueba, el 1 de septiembre de 1919, el pionero de la aviación francesa Didier Daurat, futuro primer director del aeródromo de Málaga, inauguraba los servicios regulares entre Toulouse, Barcelona, Alicante, Málaga, Tánger y Casablanca..
Pierre George, piloto y propietario de una aerolínea, buscaba lugares donde construir pistas de aterrizaje para unir Francia con sus colonias atravesando España y acabó enlazando Casablanca y Tánger con Toulouse a través de Málaga, Alicante y Barcelona.
El aeropuerto contaba en sus inicios con una pequeña pista de tierra de unos 500 metros de longitud en un terreno alquilado y la sala de espera era un pequeño cortijo situado en las inmediaciones, por aquel entonces la demanda era aún baja.
En la década de 1930, solo operaban en él avionetas biplaza.
El aeropuerto fue finalmente adquirido en 1932 y durante el año 1937 se convirtió en una base aérea y se ubicó en los terrenos de las escuelas de Tripulantes, Observadores y Especialistas del Ejército del Aire. A partir de 1939 se comenzaron trabajos para la ampliación del aeropuerto y ya actualmente cuenta con dos pistas de aterrizaje. El 12 de julio de 1946, el aeropuerto es abierto al tráfico nacional e internacional y clasificado como aduanero. Todos los servicios de pasajeros son atendidos en las dependencias de la base aérea, ya que hasta 1948 no se inaugura la estación civil de pasajeros.
A lo largo del año 1960, se produce un cambio radical en el diseño del aeropuerto ya que, junto a la ampliación de la pista de vuelo y la construcción de la pista de rodadura paralela, se configura una nueva zona terminal en el centro geométrico del campo de vuelo. Esta zona se encuentra kilómetro y medio al norte del área terminal existente, en donde se van a construir un nuevo estacionamiento de aviones, la torre de control, una central eléctrica y un edificio terminal de pasajeros. Estas obras se complementan con la instalación de distintas ayudas a la navegación, como luces para la aproximación (VASIS) y un sistema de radio ayuda (VOR) en 1965, un sistema de guía lateral (ILS) en 1966 y un radar en 1970.
El aeropuerto, que fue denominado a través del tiempo como de El Rompedizo o de García Morato, pasa a llamarse oficialmente aeropuerto de Málaga por
una orden ministerial de septiembre de 1965. Por otra orden ministerial
del 18 de mayo de 2011 se modificó su denominación oficial a aeropuerto
de Málaga-Costa del Sol.
El creciente aumento del tráfico, principalmente de los vuelos no regulares, en 1965 operaban en Málaga
unas treinta compañías con ese tipo de tráfico, obliga a construir un
terminal específico denominado estación modular para tráfico no regular.
El nuevo edificio es idéntico a los construidos en Palma, Girona, Alicante e Ibiza y se inaugura el 30 de junio de 1972.
El persistente crecimiento del tráfico obliga a pensar en la
construcción de un nuevo edificio terminal que se inaugura finalmente el
30 de noviembre de 1991 con el nombre de Pablo Ruiz Picasso.
Posteriormente se realizan nuevas mejoras, nueva torre de control,
nueva terminal y nuevas pistas de despegue y aterrizaje que conforman
las instalaciones en la actualidad
Bibliografía
https://www.malagaairportcarhire.com/es/informacion/malaga_aeropuerto_historia.htm
https://revistaelobservador.
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